Mi nombre es Stephanie Rodriguez, una obsesionada con el desarrollo humano, la mejoría y el estudio de lo que no se ve a simple vista. Esta pasión comenzó desde muy niña, y por supuesto, agradezco a mis padres por jamás limitarme a cuestionar. Era de las que hacía preguntas por todo y nada;lo ponía a prueba y así fui acumulando estudios de caso por mi propia cuenta. Digo que esta curiosidad y cuestionamiento constante fue lo que me llevó a siempre tener más de una perspectiva de las cosas, incluso sobre mí misma y los demás. Pero no fue hasta que la sociología me encontró que pude exponenciar esta pasión.
Incluso cuando me encontraba en uno de los momentos más oscuros de mi vida, que perdí a mi padre y mejor amigo consecutivamente, el preguntarme fue lo que me salvó. Me hizo indagar en esas heridas que me hacían sentir que no tenía rumbo porque a pesar de que tenía el entendimiento mi corazón no lo sentía, no estaba conectada. A lo que por cosas de la vida, sin pedirlo llegue a donde un neurocoach que me hizo poner en práctica toda la teoría que tenía con ejercicios prácticos e ideales para mi. Es así como fui moldeando mi verdad.
Verdad la cual está compuesta de que la vida es mucho más simple de lo que nos condicionaron. Actualmente voy aplicando y siendo estudiante de la vida misma. Uniendo las capacidades sociológicas con mis experiencias laborales, certificaciones en coaching y experiencias espirítuales para dar un resultado integral en cada cosa que hago. Hoy día cuento con un entendimiento bastante completo del desarrollo humano como individuo y en sociedad. Es por eso que me destaco en el acompañamiento de cerrar la brecha entre la influencia social y el crecimiento personal. De modo que voy empoderando personas a desafiar las normas sociales, liberarlos de creencias limitantes y crear la vida de autenticidad, realización e impacto social que desean.